domingo, 14 de junio de 2009

Me di cuenta...





Me di cuenta... que es importante llegar, pero es más importante darme cuenta de si vale la pena el esfuerzo.
Me di cuenta... que no importa cuánto luche, la gente cambia si quiere. O si yo decido tomarla de otra manera.
Me di cuenta... que aunque una ruptura duela, puede ser lo mejor para los dos.
Me di cuenta... que no importa lo que haga, la gente tiene un pensamiento sobre mí.
Me di cuenta... que tengo una sola oportunidad para hacer las cosas, y no debo perderla por pensar si la acepto o no.
Me di cuenta... que aunque el mundo intente detenerme, debo seguir adelante.
Me di cuenta... que pasó y pasa mucha gente por mi vida, pero sólo la gente importante quedará.
Me di cuenta... que quien está al lado tuyo en los malos momentos, no siempre es un amigo de verdad.
Me di cuenta... que pueden orientarme sobre el camino a seguir, pero la decisión es sólo mía.
Me di cuenta... que aunque la vida intente convencerme de bajar mientras subo, no debo hacerlo.
Me di cuenta... que nunca debo conformarme con lo que tengo.
Me di cuenta... que una sonrisa sincera, suele ser el mejor regalo para el alma.
Me di cuenta... que está bien ayudar al resto, pero a veces hay que ser egoísta.
Me di cuenta... que nada es tan importante como mi propio bienestar.
Me di cuenta... que puedo elegir lo que siento, e incluso puedo eliminar una mala sensación.
Me di cuenta... que nadie es tan importante como para que desperdicie tiempo en él/ella.
Me di cuenta... que el resto me ve como me veo a mí misma.
Me di cuenta... que es más importante lo que pienso que lo que digo.
Me di cuenta... que el verdadero éxito depende de mi subjetividad.
Me di cuenta... que lo único que necesito es un perro, algunos buenos amigos, a mi familia y a mí misma para ser feliz.
Me di cuenta... que las cosas tienen la importancia que yo les otorgo.
Me di cuenta... que un buen momento no siempre está plagado de carcajadas.
Me di cuenta... que estoy realmente conectada con una persona cuando la miro a los ojos y logro comprender lo que siente.
Me di cuenta... que la gente critica, difama, saca mano, juzga, censura; pero que está en mí darles prestarles atención.
Me di cuenta... que nadie es perfecto, hasta que te enamorás de vos mismo.
Me di cuenta... que debo amarme completamente, porque sólo conmigo paso cada momento de mi vida y, por ende, debo tolerarme y ser feliz en mi compañía.
Me di cuenta... que una sonrisa puede levantarme el ánimo, pero un buen abrazo me reconforta más que nada.
Me di cuenta... que no importa cuanto tiempo pase, los buenos recuerdos quedan por siempre.
Me di cuenta... que es más importante querer que ser querido, amar que ser amado, abrazar que ser abrazo, escuchar que ser escuchado, consolar que ser consolado, sentir que ser sentido, recordar que ser recordado, acompañar que ser acompañado. Es con esos pequeños actos de amor y cariño que logramos llenar nuestro corazón.